NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
INFORMA
DOCTORA ALIZA
POSTED IN DIETA Y NUTRICIÓN, MEDICINA
NATURAL
Los antioxidantes tienen beneficios de los cuáles seguro ya has
escuchado, aunque quizá aún tengas dudas sobre qué significa el efecto
antioxidante, qué beneficios te producen y cómo puedes obtenerlos en tu vida
diaria. Esta información te pondrá rápidamente en contacto con estos
beneficios.
Roberta, una mujer de 40 años, había estado en un periodo de trabajo muy
intenso, con muchas actividades todo el día, fumaba más de la cuenta, no se
alimentaba bien y tenía poco tiempo de descanso. Después de 6 semanas se sentía
agotada, su piel se encontraba deshidratada y se observaban ojeras bajo unos
ojos cansados, de hecho lucía con una edad mayor. Sabía que debía hacer algo
para mejorar, porque este periodo de trabajo no terminaría pronto, así que
pensó en usar antioxidantes, pero ¿Qué son los antioxidantes? se preguntó ella
misma ¿Para qué me servirán? y si acaso me sirven ¿Cómo debo tomarlos?
¿Necesito una receta?
Sabemos que los antioxidantes previenen la “oxidación”, pero ¿la
oxidación de qué?
Se sabe que las células requieren oxígeno para realizar sus funciones
vitales, el contacto con ésta molécula causa un fenómeno llamado oxidación, que
es la unión del oxígeno o de alguna otra molécula como nitrógeno, cloro, o
bromo, a moléculas receptoras, las cuales se convertirán en radicales libres.
Todo el tiempo ocurren estas reacciones químicas y los radicales libres son
importantes porque ayudan en ciertos procesos que la célula necesita realizar
para vivir, actuando como mediadores o reguladores fisiológicos, por ello se
mantienen en un balance estrecho, que permite que a pesar de que estas
sustancias existan normalmente, no ocurra daño. Pero cuando el balance se rompe
y tenemos un exceso de radicales libres, entonces el daño causado a las células
y en consecuencia a los tejidos, se producirá de manera irremediable. El daño
ocurre en moléculas estructurales de la célula, causando pérdida de las
funciones de las enzimas, cambios en la señalización, en particular en la información
genética porque afecta el Ácido Desoxirribonucleico (ADN) lo cual afecta la
información genética y por ello la división celular, desarrollando alteraciones
en los tejidos, la descendencia celular, actuando como un mecanismo de
envejecimiento de los tejidos, piel, músculo cardiaco, páncreas y en general,
de todos los tejidos, favoreciendo la aparición de enfermedades como diabetes,
enfermedades cardiacas, enfermedades pulmonares y aparición de cáncer. Además
de promover la muerte celular o la apoptosis (muerte celular programada).
¿Qué son los antioxidantes?
Son moléculas que tienen la propiedad de interactuar con los radicales
libres y a través de su unión con el oxígeno, limitan el poder dañino de los
radicales libres. Es decir, son un factor protector, que mantiene el balance
entre la producción de radicales libres y su depuración, limitando el daño que
éstos causan, principalmente a la membrana plasmática y al DNA.
Considerando que se trata de un balance, las situaciones que aumentan el
número de radicales libres endógenos son, la respiración celular, los
mecanismos de defensa de las células blancas de la sangre, algunas estructuras
celulares que degradan moléculas específicas y las enzimas encargadas de un
metabolismo oxidativo dentro de las células. Los factores exógenos son algunas
sales metálicas, el tabaquismo, algunos alimentos que se oxidan después de su
ingestión y los que tienen un contenido alto en grasas saturadas (alimentos
fritos), factores como el ozono, monóxido de carbono, medicamentos o
radiaciones ultravioleta (luz del sol) entre otras.
¿Qué hacen los antioxidantes?
Ahora puedes imaginar que un antioxidante es “cualquier sustancia que
retrasa, previene o elimina el daño oxidativo a una molécula blanco”.
La acción de estas substancias que están en la naturaleza, es que pueden
interrumpir el daño que ocasionan o limitar el daño potencial que podrían
ocasionar: Los antioxidantes básicamente estabilizan los radicales libres y los
anulan limitando su poder dañino. El efecto final, consiste en que pueden
proteger y revertir hasta cierto punto el daño causado por los radicales
libres.
¿Dónde se encuentran los antioxidantes?
Es importante que sepas que tu cuerpo tiene la capacidad de producir
algunos antioxidantes, que combaten los radicales libres que se forman
normalmente. Pero también tu cuerpo puede obtener antioxidantes cuando se
consume una dieta saludable. Entre los alimentos ricos en antioxidantes
encontramos las frutas, los vegetales y las verduras que contienen vitamina A,
C y E o las que tienen beta carotenos, luteína, licopeno y selenio.
Los alimentos que contienen estos nutrientes y otros antioxidantes
incluyen:
Beta carotenos: Se encuentran en una gran variedad de alimentos. Como las
zanahorias, los guisantes (chícharos), el albaricoque, brócoli, batatas,
tomates y calabacín. También se encuentra en algunos vegetales verdes, como en
las hojas de las remolachas, espinacas y col rizada. Y entre las frutas está en
el melón, la papaya, mango, durazno, calabaza y granadilla (conocida como
passion fruit en inglés)
Luteína: Se encuentra en los vegetales como la col rizada, espinacas,
acelgas, en la lechuga romana, en verduras como el brócoli, los guisantes
(chícharos), el nabo verde, en granos como el maíz y en frutas como la papaya y
la naranja. Y hasta en el huevo.
Licopeno: Es lo que le da a algunas frutas su color rosado o rojo. Por
ejemplo: al tomate, a la toronja o pomelo, a la sandía y a las guayabas.
También se puede obtener, en mucha menor cantidad de frijoles o habichuelas y
de pimientos rojos.
Vitamina A: Leche, hígado, batata, zanahoria, calabaza, espinaca,
mantequilla y huevos.
Vitamina C: Está en casi todas las frutas, especialmente las cítricas:
como la toronja o pomelo, la naranja, pero también se encuentra en la papaya,
fresa (frutilla), melón y kiwi, y en algunas plantas comestibles como son el
pimiento verde o rojo (chile morrón), col de Bruselas, coliflor y col rizada. Y
en alimentos y bebidas fortificados con vitamina C.
Vitamina E: En el aceite de soya (soja), así como en los aceites
vegetales: de girasol, de maíz, de cártamo, de trigo y de canola. Los frutos
secos como las nueces, almendras, avellanas y el maní o cacahuate y en las
semillas de girasol. También se encuentra en los vegetales verdes como la
espinaca, el brócoli y la col rizada y en cereales para el desayuno y otros
productos fortificados con vitamina E.
Selenio: Se encuentra en frutos secos como las nueces (especialmente la
nuez de Brasil), en productos de origen animal como la carne de res, el
pescado, el pollo, el pavo o el huevo además del queso y en derivados del trigo
como el pan y la pasta; en cereales de maíz, de trigo y del arroz.
Antioxidantes fenólicos (ácidos clorogénico, cafeico y epicatequinas): se
encuentran en el café y en el té verde.
Taninos, levarteresnol y quercetinas:en el vino tinto y en el té.
Dieta Balanceada
Al conocer donde podemos encontrar estos antioxidantes es claro que una
dieta balanceada, tendrá dos efectos, el primero es que no se consumirán
alimentos dañinos (ricos en grasas) y el segundo es que se obtendrán diferentes
antioxidantes en cantidades suficientes que reestablezcan el balance interno.
Entonces la alimentación debe contener, frutas, verduras, cereales, granos,
leguminosas, carne, pan o pasta y algunas bebidas con efecto benéfico sobre tu
piel, corazón, cerebro, riñón y el metabolismo en general.
Dejar de fumar
Aunado a una alimentación balanceada se deben de mejorar algunas
conductas como evitar el hábito de fumar, los efectos del tabaco son claros y
contundentes sobre la piel, el desarrollo de padecimientos y en la reducción de
la expectativa de vida, por ello es importante que consideres dejar de fumar.
Automedicación
Evitar la automedicación que favorecen la aparición en exceso de radicales
libres, como son el uso de antibióticos o paracetamol , es mejor buscar ayuda
médica.
Dormir el tiempo suficiente
Dormir lo suficiente, es decir, establecer un horario de sueño que
permita un despertar espontáneo y no forzado por una alarma, esto ayudará a
mejorar tu desempeño diario, tu concentración y ritmo de trabajo. Cuando no
duermes bien, se perpetúa el círculo vicioso de estrés, problemas para dormir,
cansancio, más estrés, dificultad… etc.
Ejercicio
El ejercicio incrementa los radicales libres, un efecto natural, pero
también ayuda a reducir peso, esto disminuye la glucosa y las grasas en la
sangre disminuyendo el ambiente oxidativo, finalmente el resultado será más
benéfico que perjudicial, así que una rutina de ejercicio diario tendrá efectos
muy positivos.
Uso de suplementos
Asegúrate de consultar con tu médico antes de tomar cualquier suplemento
vitamínico. Consumir demasiadas substancias como vitamina E, A o selenio puede
resultar peligroso.
Si bien es cierto que los alimentos ricos en vitamina E y betacaroteno
son muy saludables y ayudan a reducir el riesgo de desarrollar cáncer, la
United States Preventive Services Task Force y la American Academy of Family
Physicians, no recomiendan tomar vitamina E o suplementos de betacaroteno para
la prevención del cáncer. En las personas que fuman o tienen mayor riesgo de
cáncer de pulmón, los suplementos de betacaroteno incrementan el riesgo del
cáncer del pulmón.
Consulta a tu médico si estás considerando tomar un suplemento con
antioxidantes y vitaminas en pastillas. Los suplementos alimenticios en
pastillas no necesariamente tienen un contenido balanceado de vitaminas,
minerales o enzimas y por consiguiente, éstos pueden tener un efecto
desfavorable sobre tu salud. Por ello te conviene obtener la recomendación de
un profesional que conozca tu caso en particular.
Los Centros para el Control y la Prevención de enfermedades recomiendan
cinco a siete porciones de frutas y vegetales además de cuatro a cinco
porciones de nueces, semillas o leguminosas a la semana. Obviamente todos estos
son una fuente excelente de antioxidantes. Pero más no es mejor, el exceso
puede aumentar los radicales libres y tomar antioxidantes en forma de pastillas
puede hacer lo mismo. Por eso lo mejor es obtenerlos de los alimentos.
Roberta tiene algunos factores para tener un ambiente interno oxidativo
muy elevado, antes de considerar consumir antioxidantes por su cuenta, debe
consultar a un médico. Sin embargo lo que si puede hacer es mejorar su
alimentación balanceando los diferente grupos, organizar su trabajo de tal modo
que pueda descansar más tiempo, evitar la exposición innecesaria al sol y debe
dejar de fumar, además de implementar una rutina de ejercicio diario. Su médico
evaluará su peso, alimentación, padecimientos previos y actuales, en base a
esto decidirá qué tipo de suplemento le recomendará (si realmente lo necesita),
por cuanto tiempo y que puede esperar de su uso.