El gobernador Miguel Barbosa negó, nuevamente, tratos con el ex director de Pemex, Emilio Lozoya. Incluso, demandará por daño moral al ex funcionario federal.
“Soy honesto, actúo de buena fe y estoy limpio. Nunca le pedí ninguna gestión, ni de manera directa, ni a través de alguna persona; sus afirmaciones son totalmente falsas y nunca los podrá probar, lo reto a que presente una sola prueba”, comentó el mandatario durante su conferencia matutina.
El día de ayer, el ex colaborador de Enrique Peña Nieto acusó al hoy gobernador de Puebla de recibir sobornos millonarios, junto con otros seis ex funcionarios, para trabajar en favor de la Reforma Energética en el gobierno de Enrique Peña Nieto.
En un documento dado a conocer por el periodista Ciro Gómez Leyva en Imagen Noticias, Lozoya asegura que los recursos se entregaron en efectivo, conforme lo iba indicando el exsecretario de Hacienda Luis Videgaray, entre 2013 y 2014.
Ante los dichos vertidos, el mandatario poblano negó dicha versión; no obstante, refutó lo expuesto por el ex operador político de Enrique Peña Nieto.
“Nunca tuve contacto con Emilio Lozoya cuando él fue director de Pemex, nunca hablé con él telefónicamente, menos lo vi personalmente”, comentó el mandatario estatal.
Según la acusación, Lozoya recibió la indicación de atender las peticiones de Miguel Barbosa, las cuales consistían en trasladar a su hermano, trabajador de Pemex, de una terminal de almacenamiento en Guerrero a las oficinas centrales de la Ciudad de México, y de ser así, no armaría una revuelta por parte del PRD para la aprobación de la Reforma Energética, así como la entrega de 100 mil dólares”.
“Jamás le hice ninguna gestión de reubicación laboral de uno de mis hermanos de Guerrero a las oficinas centrales de Pemex, tan es así que hasta la fecha sigue siendo ingeniero en una planta de gasolina de esa empresa”, inquirió el mandatario estatal.
“Nunca solicité, ni recibí dinero alguno por mi participación en la reforma energética o en otra actividad legislativa”, refirió.
Incluso, el gobernador Barboso retó a Emilio Lozoya a presentar una prueba; no obstante, el oriundo de Zinacatepec presentará una demanda por daño moral. “Mi posición en la reforma energética fue públicamente en contra y de ello hay registros en el Senado; así como, la del grupo parlamentario que coordiné”, argumentó.
Lozoya declara que se en esos años se entregaron 80 millones de pesos en sobornos a siete legisladores, entre ellos Ricardo Anaya exdiputado federal y excandidato presidencial del PAN; los exsenadores del PAN Ernesto Cordero, José Luis Lavalle Maury y Salvador Vega Casillas; el hoy gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, así como al exsenador del PRI, David Penchyna.
El primer monto entregado, de 10 millones de pesos, fue presuntamente entregado el 11 de diciembre de 2013 en Torre Hares, en Avenida Ejército Nacional 225. Otros dos por 900 mil pesos y 13 millones en una sede alterna de Pemex ubicada en Montes Urales 425 en Lomas de Chapultepec, en la Ciudad de México.