NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
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LUNES 22 ABRIL 2019
NIÑOS
Y ADOLESCENTES
Es
increíble la rapidez y eficiencia con las que el teléfono celular mantiene a
los chicos en contacto inmediato y directo con toda su red de amigos. Pero a la
vez, los distrae de sus obligaciones escolares y les roba tiempo hasta del
descanso. Es vital encontrar el equilibrio para que el desempeño escolar no se
afecte.
El
móvil ha llegado a ser parte de la vida diaria de una manera tan profunda, que
incluso es difícil pensar cómo viviríamos sin él. No sólo es la comunicación
perfecta y a toda hora, además, si eres estudiante, puede convertirse en una
herramienta de estudio debido a todas las aplicaciones y beneficios que
proporciona. Sin embargo, los teléfonos celulares se han convertido en un arma
de doble filo, ya que estudios recientes indican que pueden distraerte y
robarte tiempo de tus responsabilidades escolares.
Como
muestra, veamos los resultados de un estudio cuyos resultados aparecerán en una
edición de febrero en la publicación Computers in Human Behavior. Unos investigadores de la Universidad Estatal
de Kent, en Ohio, Estados Unidos, encuestaron a más de 500 estudiantes
universitarios para analizar el uso del teléfono celular en varias de sus
funciones. Los resultados indicaron que los jóvenes pasaban un promedio de 279
minutos, es decir casi 5 horas diarias, usando su celular. Además, enviaban aproximadamente 77 mensajes
de texto al día.
Excluyendo
escuchar música, los investigadores monitorearon el uso que los estudiantes
daban no sólo al teléfono en sí, sino a otras de sus funciones: mensajes de
texto, comunicaciones de voz, correos electrónicos, enviar y compartir fotos,
uso de juegos, redes sociales, ver videos, navegar por el internet, así como
otros usos impulsados por las aplicaciones y los programas (software).
Como
parte del estudio, los participantes
permitieron que los investigadores tuvieran acceso a sus calificaciones
escolares, a la vez que respondieron a cuestionarios relacionados con su
satisfacción por la vida y el nivel de felicidad que sentían.
El
pasar muchas horas en el móvil no sólo repercutió negativamente en el
rendimiento escolar de los participantes, sino que además, el exceso de tiempo
en el teléfono celular y en sus diferentes funciones, no contribuyeron a un
sentido de bienestar entre sus usuarios. Por el contrario, los autores del
estudio señalaron que para algunos usuarios de teléfonos móviles, esa especie
de “obligación percibida” de permanecer conectados constantemente a las redes
sociales a través de los teléfonos celulares, puede provocarles ansiedad.
Cómo
desprenderte del celular
Esa
tendencia a depender constantemente del celular, no solamente se ha dado entre
los estudiantes. Una personas a cualquier edad puede desarrollar hábitos que no
son saludables relacionados al celular. Si estás en ese grupo, o conoces a
alguien que no se despega de su teléfono celular, te sugiero que pongas en
práctica las siguientes recomendaciones (o que las compartas con alguien que lo
necesite), son muy sencillas:
Identifica
los motivos. ¿Qué te hace estar usando el celular tanto? ¿Estás aburrido(a)?
¿Te sientes solo(a)? ¿Estás ansioso(a)? Si así es, ¿por qué no buscas otra
forma de calmar esos sentimientos? Practica algún deporte o has ejercicio, sal
a dar una buena caminata, alquila una película, fomenta el hábito de la
lectura… ¡En fin! Sobran actividades que pueden alejarte del celular.
Contrólate.
¿Realmente tienes que contestar el teléfono cada vez que entra una llamada o un
mensaje? Si estás en clase, por ejemplo, ¿por qué no lo pones en tu maletín en
vez de sobre tu escritorio para evitar que te distraiga?
Ponte
metas. En vez de revisar tu celular constantemente, procura verlo cada quince
minutos primero, después cada treinta, cada cuarenta minutos… Limitar su uso,
te dejará más tiempo para darle prioridad a cada cosa en su momento.
Limita
los escenarios. Establece “zonas rojas” es decir, áreas en las que
definitivamente no tendrás el celular contigo: la mesa del comedor, tu
cama, mientras caminas, el vehículo, el
cuarto de baño… Evita sobre todo conversar, enviar o recibir mensajes de texto
mientras conduces. Toda tu atención debe estar concentrada en el volante y en
la carretera o autopista para evitar un accidente. Como peatón también debes usar la prudencia:
si cruzas la calle mientras conversas, a duras penas podrás prestar atención a
un vehículo en movimiento o a cualquier obstáculo en la acera.
Recuerdaqueel
teléfono celular es muy conveniente y tiene muchas ventajas, pero si limitas su
uso, sobre todo a la hora de entrar a clases o cuando vas a estudiar más tarde,
ya que si lo abusas, puede tener consecuencias negativas no sólo en tus
estudios. Llévalo a la medida necesaria
y te proporcionará más beneficios.