NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
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EN MUJERES, PIEL
La respuesta a esa pregunta puede
ser la clave para decirle adiós a la incómoda resequedad. Sigue leyendo para
que te enteres cuáles son las posibles causas de la piel seca, y así dar el
primer paso hacia la suavidad de tu piel.
Tu piel puede resecarse por muchos
motivos, algunos evidentes y otros no tanto. Por ejemplo, es común escuchar que
la piel se seca durante el invierno, pues mientras el frío aumenta, la humedad
del aire disminuye. Y así decidas quedarte dentro de la casa para no exponer tu
piel al intenso frío, la calefacción y las estufas o chimeneas de leña, también
contribuyen a la piel seca pues el aire caliente reduce la humedad.
Y la historia se repite durante el
verano. El sol es el principal factor que seca tu piel en esta época del año.
Si estás mucho tiempo al sol, y no te proteges de los rayos UV, éstos pueden
penetrar varias capas de tu piel rompiendo la elastina y el colágeno que la
mantiene hidratada y suave. Así se crean arrugas profundas que con el tiempo
dan la sensación de que tienes la piel seca.
Además del sol, el aire
acondicionado también ayuda a reducir la humedad de los espacios cerrados. Y tu
piel también puede sufrir bastante si vives en una zona desértica como
California o el norte de México, pues el clima seco y arenoso también la
reseca.
Pero, ¿sabías que bañarte en exceso
también te reseca la piel? ¡Así es! Aunque no parezca tan evidente, el exceso
de agua en tu piel rompe la capa de lípidos (grasa) que la protege. Por eso no
es muy recomendable bañarte en la ducha o en la tina por tiempos muy
prolongados, y menos si te gusta el agua muy caliente. Y tampoco es bueno estar
mucho tiempo dentro de una piscina, especialmente cuando el agua tiene mucho
cloro.
Otra causa potencial de piel seca
es el uso de jabones y detergentes muy fuertes para la piel. Muchos jabones
desodorantes o antibacterianos que se usan en la ducha pueden ser muy fuertes
para tu piel pues hacen que pierda agua y grasas que la protegen y la mantienen
hidratada. Así mismo, no te extrañes que tus manos estén resecas después de
lavar los platos o la ropa sin usar guantes, pues los detergentes que se usan
en esos casos fueron diseñados para limpiar superficies duras y no para
proteger tus manos.
Factores externos como éstos,
relacionados todos con el medio ambiente en el que te encuentras, están entre
las causas más comunes de la resequedad de la piel. Pero también puede ser que
tu piel esté seca debido a alguna condición personal, malos hábitos o alguna
enfermedad que tengas.
Por ejemplo, la edad es un factor
implacable en la resequedad de la piel. Con el envejecimiento, tu piel empieza
a experimentar cambios naturales que la vuelven más seca.
También se dice que la piel seca
puede tener causas genéticas. Así que si alguien cercano en tu familia padece
de resequedad, puede ser que tú le hayas heredado esa tendencia.
En cuanto a las enfermedades, la
psoriasis puede ser una de las causas de la piel seca. Esta es una condición
médica por la cual se forman unos puntos de resequedad y aspereza concentrados
en partes específicas de tu piel, como los codos o las piernas por ejemplo.
El hipotiroidismo también suele ser
causante de resequedad en la piel pues, cuando tu cuerpo no produce suficientes
hormonas provenientes de la tiroides, las glándulas dejan de sudar o de
producir la grasa natural que la humecta y la protege.
Pero si ves que la resequedad surge
repentinamente, aumenta con rapidez, se acompaña de picazón (comezón),
enrojecimiento extremo y se levantan escamas en tu piel, puede ser que tengas
una dermatitis. Ésta es una inflamación de la piel causada por una alguna
sustancia específica que tocaste o que te cayó encima en algún momento. En ese
caso necesitas consultar con un médico cuanto antes.
En el resto de los casos, la piel
seca puede corregirse con hábitos diarios y remedios caseros que continuaremos
compartiremos contigo en Vida y Salud.
Imagen © iStock / m-asque