NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
INFORMA
NOTICIARIO DE ANÁLISIS Y COMPRENSIÓN noticiasdeteziutlan@hotmail.com
MARTES 25 JULIO 2017
DOCTORA
ALIZA
PUBLICADO
EN MUJERES
En
una tarde cualquiera, estás cómodamente sentada en tu sala a punto de saborear
un café. De repente, te viene un calor interior muy intenso, la cabeza, el
cuello y el pecho se enrojecen, ¡ahora estás sudando! Sí, posiblemente tengas
más de cincuenta años y, de no tomar cartas en el asunto, por un par de meses
hasta por siete años, los bochornos o calores serán cosa de todos los días… y
noches. Quizá, un factor que te ayude a minimizar sus efectos sea dejar de
consumir cafeína, entre otras estrategias para la menopausia.
Un
estudio reciente realizado por la Clínica de la Salud de la Mujer de la Mayo
Clinic en Rochester, Minnesota, publicado en la revista Menopause y que incluyó
datos de 1,806 mujeres, relaciona el consumo de cafeína con el aumento de la frecuencia
y la intensidad de los bochornos, reportó la doctora y directora de la clínica,
Stephanie Faubion. De acuerdo con la publicación Science Daily, estos cambios
súbitos de temperatura que incomodan, son los síntomas más frecuentes durante
la menopausia. Le ocurren al 79 por ciento de las mujeres en la pre-menopausia
o el climaterio (la antesala de la menopausia) y al 65 por ciento de mujeres
posmenopáusicas.
Más
que huir de este fenómeno natural —lo que resulta imposible, por cierto—, más
vale cuidarse, darle la cara y cambiar algunos hábitos para que este cambio
hormonal no se vuelva una pesadilla. Sí hay algunas modificaciones, no vamos a
mentir; sin embargo, la realidad es que no todas las mujeres tienen síntomas
severos; hay quien va diciéndole adiós a su edad reproductiva y dándole la
bienvenida a la menopausia sin mayores sobresaltos.
¿Qué
es la menopausia?
Pero,
¿qué es la menopausia exactamente? De manera muy breve la describimos y te
proponemos algunos cambios sencillos en tu estilo de vida si andas rondando los
40, para que los 50 no te agarren desprevenida: una vida sana, dieta
balanceada, ejercicio y el uso de ropa adecuada puede marcar la diferencia.
¿Qué
síntomas se relacionan con esta etapa de la vida? Hay algunos que pueden
manifestarse. Entre ellos están los siguientes:
Periodos
irregulares (en la perimenopausia)
Sequedad
vaginal, lo que puede producir dolor durante las relaciones sexuales
Trastornos
en el sueño
Irritabilidad
Osteoporosis
Enfermedad
cardiovascular (ataques cardiacos o derrames cerebrales
Disminución
del apetito sexual
Bochornos
(sofocos o calores)
La
realidad es que la menopausia es un periodo ineludible de la vida. Se trata de
una cita con nuestro destino. Así como pasamos por la pubertad en que se inicia
la menstruación y la edad reproductiva, llega el día en que comienzan los
primeros indicios de que la precisión del periodo se modifica y luego para, los
50 es la década clave. Si luego del año de ausencia del periodo (que marca la
menopausia), viene alguna secreción (un sangrado) es necesario ir al médico
para hacerse un chequeo porque eso no sería normal. Si cumples 60 y no has
tenido ningún síntoma, no dejes de ir a una revisión de rutina.
La
menopausia es un proceso complejo que ocurre debido a los cambios hormonales.
Por describirlo de manera sencilla, los ovarios dejan de producir estrógenos y
progesterona. Ambas hormonas son las responsables, entre otras funciones, de
tener la capacidad de embarazarse. Lo que se llama edad reproductiva ocurre
cuando estas hormonas se producen en nuestros ovarios cada mes.
¡Qué
calor!
Si de
repente te viene un calor intenso, es podrías formar parte de hasta el 75 por
ciento de las mujeres que padecen bochornos durante la menopausia, que puede
llegar a ser hasta dos veces al día o más seguido. Esto puede ser relevante,
sobre todo cuando un estudio reciente publicado en la revista JAMA Internal
Medicine, ha reportado que el promedio de tiempo que las mujeres pueden padecer
bochornos es de siete años. El escenario más extendido en este estudio
realizado en Wake Forest School of Medicine en Winston, Salem, en Carolina del
Norte, fue de 11.8 años, y según los investigadores, las Afroamericanas fueron
las que tuvieron el periodo de bochornos más prolongado (10.1 años), seguido
por las hispanas con una duración de 8.9 años; curiosamente las Japonesas y las
chinas fueron las que los tuvieron más cortos, de 4.8 y 5.4 años
respectivamente; Mientras que las blancas en promedio tuvieron bochornos o
calores por 6.5 años. Los bochornos o síntomas vasomotores se relacionaron con
el estrés, la depresión, la ansiedad y menor escolaridad.
Cafeína,
¿aliado o enemigo?
Según
el estudio de la Clínica Mayo mencionado previamente, el 85 por ciento de la
población estadounidense consume bebidas con cafeína diariamente. Varios
estudios previos habían hallado que la cafeína podía empeorar los síntomas de
la menopausia (específicamente los bochornos o calores); este estudio se une a
los anteriores y sugiere que limitar la cafeína podría ayudar a las mujeres que
sufren de los molestos bochornos durante el día y los sudores por las noche.
Aunque todavía se requieren más estudios.
Es
decir, no hay resultados concluyentes que establezcan que la cafeína produce
los bochornos. En todo caso, los avances en este terreno nos dan herramientas
para ser introspectivas: ¿has notado si cuando tomas café te viene el bochorno
de inmediato? Es decir, sin ser una regla rígida, es necesario poner atención
para verificar si nuestro organismo responde a los factores positivos de la
cafeína —y la volvemos nuestra aliada— o si nos estimula tanto que se vuelve
nuestra enemiga.
Otro
estudio publicado en línea en Menopause de la revista de The North American
Menopause Society, encontró que un aliado alimenticio es la soya o soja, pero
únicamente entre las mujeres que producen la molécula equol soya, mediante
procesos metabólicos. De acuerdo con el reporte de la Sociedad Norteamericana
de Menopausia hay entre 20 y 50 por ciento de mujeres estadounidenses y
europeas que lo producen de manera natural. Para ellas, que la soya que
consumen ayuda a disminuir los bochornos, lo cual es una muy buena noticia. Por
otro lado, para las mujeres que no producen equol, no hace ninguna diferencia
cuánta soya consumen….no les ayuda con los bochornos. Si quieres probar si te
sirve, incorpora alimentos con soya durante 4 a 6 semanas. Si no mejoran tus
bochornos, no te van a mejorar.
Factores
que promueven el bochorno
Si
bien la genética juega un papel relevante entre quienes padecen bochornos: por
ejemplo, las afroamericanas son más propensas que las japonesas, las chinas y
las europeas. Lo cierto es que hay factores que pueden funcionar como
desencadenantes para empeorar el efecto desagradable de los bochornos. Algunos
de ellos son los siguientes:
Fumar
Tomar
café y otros estimulantes
Obesidad
Sedentarismo
Ansiedad
Depresión
Problemas
de memoria
Mantén
los bochornos a raya
En
cuanto comiences a notar irregularidades en tu ciclo menstrual, comienza un
diario. En él registra lo que comes y tras cuatro o cinco semanas nota qué
desencadena tus bochornos. ¿Serán los condimentos, los picantes, las sopas, los
caldos? Es fundamental que te vuelvas perceptiva y lo anotes todo. Tu médico
valorará mucho que le proporciones la información precisa.
Anota
los medicamentos, vitaminas, suplementos y cualquier tratamiento (incluso
hierbas, homeopatía, etcétera) que tomes de manera regular. Incluye las dosis y
la frecuencia con que lo tomas.
Como
varios estudios han relacionado el consumo de tabaco, cafeína y alcohol como
desencadenantes (aunque no es definitivo), considera reducirlos o evitarlos. Si
los consumes, anótalos en tu diario para que reconozcas cómo reaccionas a
ellos.
Una
vez que sabes que los bochornos forman parte de tu vida, asúmelo: cambia tu
manera de vestir, de forma que puedas irte quitando lo que te acalora por
capas: el abrigo, el suéter, el chaleco, la blusa de manga larga, la playera de
tirantes… La idea es que tengas opciones para ventilarte.
Para
las noches ten a la mano almohadas de refrigeración, ventiladores y también
procura que tu pijama sea ligera y con varias capas de ropa. Dormir bien es
fundamental para mantener tu calidad de vida y que no afecte tu rendimiento.
Lo
que se recomienda como terapias alternativas para bajar el estrés te
beneficiará: practicar yoga, Tai Chi, meditación, acupuntura, masajes,
etcétera. Aquello que ayuda a la respiración, ¡te aliviará! Lo que le da
espacio psicológico, también. El efecto placebo ha sido un elemento en los
estudios realizados, por lo que mantener una actitud positiva te ayudará.
Procura
conservar tu peso en un rango saludable.
Mantente
activa.
Relájate.
Haz
ejercicio aeróbico (cardiovascular: como caminar, montar bicicleta, nadar,
etc.): además de quemar grasa producirás serotonina, la hormona de la
felicidad. Seguro contrarrestará aquello que te produce confusión y desazón
durante este tránsito de la menopausia.
Si de
plano los bochornos no ceden y se convierten en tu pesadilla, acude a tu médico
y revisen juntos —apoyados con las observaciones de tu diario y tus
antecedentes médicos— si una terapia hormonal es adecuada para ti. Pregúntale
sobre los tipos de hormonas, incluyendo las hormonas bioidénticas. También
existen medicamentos sin hormonas que alivian algunos síntomas. Consulta con tu
médico otras alternativas.
Recuerda
que así como la pubertad, la menopausia no es una enfermedad, es una condición
normal en la vida de la mujer pero, si los calores o bochornos te causan
demasiadas molestias, existen tratamientos.
Imagen
© iStock / roboriginal