NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
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DOCTORA
ALIZA
PUBLICADO
EN SALUD VISUAL
A
veces los ojos se irritan, arden y hasta pueden secretar (producir) sustancias
espesas, de color blanco o amarillento.
Las causas de la secreción y el ardor pueden ser variadas: desde
infecciones hasta una basurita en el ojo. Aquí te contamos por qué puede
ocurrirte y cuándo es necesario que acudas al especialista.
Una
mañana, Delfina se despertó con los ojos cerrados: algo le impedía abrirlos. Se
asustó tanto que empezó a llorar y a llamar a su mamá a toda voz. Luego de tranquilizarla, la mamá comenzó a
quitarle las lagañas con un algodón humedecido en té húmedo, y al terminar
llamó para pedir un turno urgente con el oftalmólogo (que es el médico
especializado en los ojos).
Más
tarde, el médico determinó que Delfina tenía una condición conocida como
conjuntivitis, algo que en general no es grave aunque sí necesita tratamiento,
como si fuera una gripe u otra enfermedad provocada por un microorganismo. En
el caso de Delfina se debía a una bacteria.
Pero
esa no es la única razón por la cual los ojos pueden ponerse llorosos,
irritados y hasta secretar sustancias espesas de color amarillento o blancuzco.
Algunas veces, por ejemplo, el ardor y la picazón en los ojos se deben a los
contaminantes ambientales, como el humo indirecto del tabaco o el smog (niebla
tóxica) ambiental.
Otras
causas de la secreción y el ardor en los ojos:
Alergias,
incluyendo las alergias estacionales (o fiebre del heno)
Infecciones
provocadas por bacterias o virus, incluso la gripe y los resfriados pueden
provocar ojos llorosos, rojos e irritados.
Irritantes
químicos (como el cloro en una piscina o productos de maquillaje).
Conjuntivitis
o conjuntivitis aguda, tal como tenía Delfina, que es una inflamación o
infección de la membrana que recubre los párpados, denominada conjuntiva, que
se produce principalmente por un virus o una bacteria.
Resequedad.
A veces, los ojos también se irritan y lloran por la falta de la producción de
las lágrimas necesarias para mantener la lubricación normal de los ojos o para
eliminar partículas y cuerpos extraños. Aunque parezca contradictorio, a veces,
cuando hay sequedad en los ojos se produce una sensación molesta que hace que
el cuerpo produzca un exceso de lágrimas.
Presencia
de un cuerpo extraño. Las molestas basuritas en los ojos pueden convertirse en
un verdadero problema. Hay que evitar restregar el ojo o presionarlo para
evitar lesionar la córnea, que luego puede causar problemas graves, como
infecciones, entre otros. En estos casos, es frecuente que sientas ardor en el
ojo y que llore ya que, justamente, producirá más lágrimas para tratar de
eliminar el cuerpo extraño que se ha alojado en él.
Para
calmar la irritación en todos los casos, puedes utilizar compresas de agua
fría, colocadas suavemente sobre los ojos sin hacer presión ni frotar.
El
oftalmólogo puede recomendarte el uso de lágrimas artificiales si es que tienes
resequedad en los ojos. Si la causa es una alergia, te recetará gotas con
antihistamínico u otro producto. En casos más severos hay otras medicinas de
acuerdo a tu problema.
Lo
que puedes hacer en casa para aliviar los síntomas:
Aplica
compresas frías cuando sientas picazón o ardor.
Si la
secreción ha formado una costra en el ojo, aplica compresas calientes para
ablandarla. Lava los párpados delicadamente con champú de bebé para retirarla.
Este tipo de champú no arde aunque caiga en los ojos.
Usa
lágrimas artificiales de 4 a 6 veces al día (lee las instrucciones o sigue las
indicaciones del médico). No uses ningún otro tipo de gotas si no te las ha
indicado el médico, ya que pueden
empeorar los síntomas. Para obtener un alivio mayor, refrigéralas para que
refresquen más los ojos.
Si se
trata de conjuntivitis, además de las gotas indicadas por el doctor, recuerda
lavarte las manos con frecuencia y evita frotarte los ojos.
Ten
en cuenta que el lagrimeo o la formación de lagañas es algo común, en especial
por las mañanas. Pero cuando esos síntomas están acompañados de ardor, picazón
e irritación del ojo, o cuando la secreción es más espesa y hasta hace que se
peguen los ojos, entonces existe un problema que requiere que vayas con el
especialista.
No
dejes de consultar a un oftalmólogo cuando se presenten estos síntomas:
La
secreción es espesa, verdosa o con pus.
Tienes
dolor en los ojos y sensibilidad a la luz.
Notas
que te ha disminuido la visión.
Los
ojos son unos órganos que te permiten ver el mundo a todo color. ¡Cuídalos! Si
empiezan a darte alguna señal de alerta, como ardor o secreción, actúa
rápidamente para mantenerlos limpios y brillantes. Dicen que una mirada vale más que mil
palabras. Que la tuya diga: estoy saludable y feliz.
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© iStock / dtimiraos