NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
INFORMA
NOTICIARIO DE ANÁLISIS Y COMPRENSIÓN noticiasdeteziutlan@hotmail.com
LUNES 7 AGOSTO 2017
PUBLICADO EN EJERCICIO, SALUD SEXUAL
He aquí dos actividades que no deberías dejar de practicar:
el ejercicio y el sexo. Tanto uno como otro le proporcionan grandes beneficios
a tu salud en general. Y para potenciar estas ventajas, sigue leyendo y
descubre qué ejercicios pueden ayudarte a mejorar tu actividad sexual, para que
puedas disfrutarla aún más y sentirte más saludable y satisfecha/o.
El ejercicio físico y una relación sexual satisfactoria
pueden mantenerte en buena forma física y emocional. Y, si lo practicas de
manera segura y responsable, ¡el sexo es salud! Ahora bien, ¿sabías que hay
ejercicios que pueden ayudarte a mejorar tu desempeño durante la intimidad? No
importa si eres hombre o mujer, si quieres mantener no sólo una buena salud,
sino también si quieres disfrutar más y quieres tener un mejor desempeño a
nivel sexual, ponte en movimiento.
¿Hay ejercicios para mejorar la vida sexual?
Desde los ejercicios para fortalecer los músculos en
general, como las flexiones de los brazos, los abdominales, el levantamiento de
pesas, los movimientos de rotación del torso a un lado y al otro para
fortalecer y afinar la cintura, así como los ejercicios de estiramiento, yoga,
Pilates y los ejercicios aeróbicos (como correr, nadar y caminar), te ayudan a
mantenerte en forma y con más flexibilidad a la hora de llegar a la intimidad.
Además, son buenos para el corazón y el sistema circulatorio, entre otras
cosas.
¿Pero esto qué tiene que ver con el sexo? Pues mucho, ya
que mantener un buen estado físico en general te permite tener relaciones
sexuales más placenteras. Hay estudios que demuestran que las personas mayores
de 50 o 60 años que se ejercitan con regularidad también tienen una vida sexual
más activa que la de las personas de su misma edad, que tienen estilos de vida
sedentarios.
Otros resultados demuestran que los hombres mayores de 50
años de edad que tienen una vida activa tienen menos riesgos de sufrir disfunción
eréctil, (que es cuando no se logra la erección o se dificulta), y es uno de
los problemas sexuales más comunes entre los varones.
A cualquier edad, el ejercicio aporta los siguientes
beneficios a tu desempeño en la relación de pareja:
Mayor fuerza y resistencia muscular que te permite lograr y
mantener las posiciones durante la relación íntima
Mejor capacidad de oxigenación y mejor circulación del
cuerpo, lo que mejora las erecciones y su potencia
Un cuerpo ágil, tonificado y fuerte mejora tu autoestima y
la imagen que tienes de ti mismo(a). Esa seguridad propia se traslada a la
relación de pareja, ¿quieres algo más “sexy”?
Hay ciertos ejercicios especialmente recomendados y éstos
son:
En particular para las hombres, las planchas o lagartijas (push
ups): proponte realizar 3 series de 12 a 15 repeticiones cada una. Este es un
ejercicio clásico que fortalecerá tus brazos, torso y abdomen. Si no puedes
realizar todas las series, no importa. Comienza por una cantidad mínima. Irás
ganando en fortaleza y resistencia con el tiempo.
Para ambos sexos: los abdominales. Un vientre plano no es la única ventaja que
obtienen, ya que los hombres y las mujeres ven una mejoría en la estabilidad y
la fuerza para mantener las posiciones, así como espaldas más firmes. Los
hombres en particular también lograrán un mejor empuje durante la penetración.
Acuéstate sobre el suelo con las piernas flexionadas y los brazos flexionados
detrás de la cabeza. Apoya la cabeza sobre las manos, barbilla hacia el techo.
Ahora, lleva el torso hacia arriba, sin elevar las caderas del suelo, los
músculos del abdomen tensos (procura no empujar la cabeza con los brazos para
no lesionar la nuca). Realiza 3 series de 15 repeticiones cada una. Para evitar dolores de espalda, puedes
trabajar tus músculos abdominales de pie. Párate con las piernas ligeramente
separadas, los músculos del abdomen comprimidos, llevando el ombligo hacia
adentro. Levanta una rodilla al mismo tiempo que tratas de tocarla con la mano
opuesta. Repite por el otro lado. Puedes alternar el levantamiento de la
rodilla una vez (sencillo), o hacerlo doble o triple, apoyándote fuertemente en
la pierna contraria.
Elevaciones de cadera (también se conocen como puente o
bridge): los dos miembros de la pareja pueden fortalecer los glúteos, la
pelvis, la parte baja de la espalda y la parte posterior de los muslos.
Acuéstate sobre un colchón en el suelo, flexiona las piernas y coloca los
talones cerca de los glúteos. Ahora, levanta la cadera, contrae los glúteos
(abdominales tensos, tratando de llevar el ombligo hacia adentro) y sostén la
posición durante 3 a 4 segundos. Baja las caderas al suelo y repite. Como meta,
proponte realizar 3 series de 15 repeticiones cada una. Estos ejercicios
fortalecen los músculos de la pelvis lo que ayuda a intensificar las
contracciones durante el orgasmo.
Las sentadillas (o squats): ponte de pie con las piernas
ligeramente separadas, brazos a lo largo del cuerpo (puedes hacerlas con pesas
o sin ellas). Flexiona las rodillas, llevando hacia atrás la pelvis (como si
fueras a sentarte en una silla imaginaria). Vuelve a la posición inicial y
repite el movimiento. Puedes realizarlas con las piernas separadas o
juntas. Evita inclinar el torso hacia
adelante. Todo el movimiento se realiza con la cadera, llevándola hacia atrás
mientras flexionas las rodillas. Con este ejercicio fortaleces los glúteos y
los muslos, lo que te dará más empuje en
la cadera, más resistencia y más fuerza para practicar otras posiciones en el
encuentro sexual. Realiza 3 series de 8 a 12 repeticiones cada una.
Otra alternativa que también puede serte muy útil son los
denominados ejercicios de Kegel, que se recomiendan para controlar la
incontinencia urinaria (que es cuando no puedes aguantar las ganas o deseos de
orinar o cuando se te sale un poco de orina al reírte o al estornudar, por
ejemplo). Si bien estos ejercicios están orientados principalmente a las
mujeres (especialmente después de dar a luz), los hombres también se benefician
con ellos puesto que pueden llegar a controlar la eyaculación y hasta aumentar
el volumen de sangre en el pene para lograr erecciones más firmes.
¿Cómo se hacen los ejercicios de Kegel? Resulta sencillo
aprender esta técnica, pero a veces puede ser difícil identificar los músculos
de soporte ubicados en la pelvis, ya que no se usan conscientemente con
frecuencia. Una forma de detectarlos es intentando parar la orina mientras está
saliendo. Si lo logras, aprendiste el movimiento básico. Una vez que hayas
identificado los músculos, contráelos y sostén la posición por 3 segundos,
luego relájalos otros 3 segundos y repite esta secuencia 10 veces, tres o
cuatro veces por día.
Ahora ya sabes qué ejercicios puedes hacer para mejorar tu
actividad sexual. También sabes que el sexo puede ayudarte a mejorar tu salud
en general. Si quieres saber más sobre estos temas, no dejes de leer este otro
artículo que publicamos en Vida y Salud hace algún tiempo, sobre los remedios
naturales para aumentar tu deseo sexual.
Mejorar tu vida en pareja y tu salud queda en tus manos. ¡Ponte en
movimiento!
Imagen © iStock / Razvan