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MARTES 29 AGOSTO 2017
“Trascendió que las
dos féminas estaban embarazadas; el conductor quedó detenido por la Policía
Federal”
POR: ODILÓN LARIOS NAVA
Dos mujeres, presumiblemente embarazadas, perdieron
la vida cuando el auto en que viajaban fue impactado por detrás por una
camioneta en la carretera federal Amozoc-Acajete, a la altura de la 5 Oriente,
en Amozoc. El presunto responsable habría sido aprehendido por la Policía
Federal, pero los pobladores acusaron que los uniformados pretendían
protegerlo, por ello agredieron a los policías y dañaron una de sus patrullas,
la cual amenazaban con incendiar.
El choque ocurrió alrededor de las 19:30 horas,
entre una camioneta Ford, tipo Escape, color vino, con placas de circulación
TXG-28-94 del estado de Puebla, cuyo conductor se encuentra detenido. Impactó
por alcance a un Chevy, rojo, con placas 604-ZWB del Distrito Federal, en el
cual viajaban cinco personas, entre ellos dos mujeres de las cuales se dijo que
estaban embarazadas.
Las dos mujeres que perdieron la vida fueron
identificadas como Laura García Peláez, de 26 años y Judith Arenas Sánchez, de
32 años de edad. Trascendió que ambas eran, esposa y hermana, respectivamente,
del conductor del Chevy, y que ambas estaban embarazadas. Los otros tres
tripulantes de ese vehículo resultaron lesionados.
Al respecto de la mecánica de hechos, fuentes
extraoficiales señalaron que presumiblemente los federales perseguían a la
camioneta Ford, y esta terminó impactando por detrás al Chevy, después la
Escape, se impactó contra un inmueble y el chofer fue detenido.
El Chevy se impactó contra un muro, una de las
mujeres quedó muerta dentro del vehículo y la otra salió proyectada. El
presunto responsable, el conductor de la camioneta intentó escapar, pero según
las versiones de los vecinos habría sido detenido por la Policía Federal.
Los vecinos manifestaron inconformidad porque no
sabían a dónde habían llevado los federales al detenido, por lo que amenazaron
con cerrar la circulación y también amenazaban con linchar a los uniformados.
Antes de las diez de la noche la situación se había
tranquilizado y los policías federales comenzaron con las diligencias del
levantamiento de ambos cadáveres.