NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
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VIERNES 27 ABRIL 2018
PUBLICADO
POR: DOCTORA ALIZA
Si
quieres convertirte en la alquimista del hogar, aquí encontrarás las hierbas
medicinales más populares, para qué se usan, y lo que dice la ciencia acerca de
qué tan efectivas son. Para que puedas conocer más sobre ellas y librarte de
los dolores y los malestares de una manera natural, tal como lo hacían nuestros
antepasados.
“Las
brujas no existen, pero que las hay las hay”, dice el dicho popular. Y muchas
veces, con los remedios caseros ocurre algo similar: quizás sea cuestión — como
dicen por ahí — de “creer o reventar”. Más aún, la Organización Mundial de la
Salud (OMS) reconoce a la denominada medicina herbaria, que es la que utiliza
hierbas medicinales. Afortunadamente, actualmente hemos empezado a hacer más
estudios científicos para entender sus efectos terapéuticos, sus efectos secundarios,
sus contraindicaciones y cómo pueden interactuar con otros tratamientos.
Algunas personas conocen los remedios con hierbas y otros tratamientos como
medicina complementaria o integral.
Incluso,
su uso se ha intensificado durante los últimos años y como mencioné, con él las
investigaciones que buscan determinar sus beneficios y sus riesgos. Así, en
muchos casos la magia puede desaparecer al analizar cada hierba en particular y
comprobar cuáles son los compuestos que contienen, responsables de generar tal
o cual efecto en el cuerpo.
Para
que puedas tenerlas en cuenta e incluirlas como alternativa para que alivien
tus malestares, aquí te contamos cuales son algunas de las hierbas medicinales
más populares, para qué se utilizan y qué dicen las investigaciones científicas
al respecto. Luego, esperamos que nos cuentes, cuáles son las que tú prefieres
y por supuesto, que consultes con tu médico ante cualquier pregunta que tengas
al respecto.
Equinácea:
Se puede consumir en té, píldoras o cremas. En general se usa para combatir los
resfríos, catarros o gripe y estimular el sistema de defensa. Los estudios
científicos han tenido resultados mixtos en cuanto a su efectividad para
prevenir o tratar los catarros. Sin embargo, la mayoría de los estudios no han
demostrado que su efectividad en el
sistema inmunológico (de defensas del organismo). Sin embargo, se continúan
haciendo estudios al respecto. Los efectos secundarios, si se presentan, son
náusea, indigestión, o diarrea. Algunas personas pueden ser alérgicas a ella.
Más detalles sobre la equinácea aquí.
Manzanilla:
Se suele usar como antiinflamatoria, antiespasmódica, cicatrizante,
antibacteriana y estimulante del funcionamiento de la piel. Se la usa de manera
externa para infecciones en la piel y como infusión para la digestión e
inflamaciones gastrointestinales. No existen muchos estudios de esta hierba.
Algunos sugieren que puede ser efectiva para la ansiedad, los cólicos
abdominales y la diarrea y para algunas condiciones de la piel. Ocasionalmente
algunas personas son alérgicas a la manzanilla. Más sobre la manzanilla aquí.
Té
verde: Tiene compuestos antioxidantes denominados polifenoles. Sobre esta
infusión milenaria en China, los estudios sugieren que podría brindar una
modesta protección contra el cáncer y que podría favorecer la longevidad, pero
se requieren más estudios al respecto. Se sugiere que se eviten los extractos
concentrados y se recomienda que se beba el té verde en infusiones en
moderación por su contenido de cafeína. Definitivamente evita los extractos de
te verde si tienes problemas de hígado ya que ha habido casos reportados de
toxicidad muy severa. Más detalles sobre el té verde aquí y aquí.
Canela:
Muchos la usan para bajar la glucosa en la sangre, especialmente si tienen
diabetes tipo 2, pero los estudios no se ponen de acuerdo. Puedes ver más
detalles en una nota que publicamos sobre la canela y la diabetes aquí.
Ajo:
Si bien se le utiliza en las comidas para darles un sabor especial; de paso,
también lo usan para ayudar a bajar el colesterol, la presión arterial, y por
sus efectos anticoagulantes, es decir que hace que la sangre sea más delgada.
Además, se usa para combatir bacterias y hongos, bajar el azúcar, y mejorar el
sistema de defensas o sistema inmunológico, lo han usado ¡hasta para los
callos!. Su lado negativo es que produce olor en la piel y el aliento (el
perejil ayuda a combatirlo) y puede producir molestias gastrointestinales. ¿Qué
dice la ciencia? Un ajo en polvo de Kwai baja la presión arterial un 7 a
8%, el ajo aplicado en la piel si ayuda
contra las infecciones causadas por hongos, incluyendo el pie de atleta. El
comer ajo podría ayudar a disminuir el riesgo del cáncer del colon, del recto y
del estómago, pero no el tomar suplementos de ajo y el ajo disminuye el
endurecimiento de las arterias (ateroesclerosis) que tiende a suceder con la edad.
Para las otras cosas no se tiene
suficiente evidencia científica para decir que el ajo funciona o se ha
comprobado que no funciona. Más sobre el ajo y el colesterol aquí.
Ají
(chile): contiene un ingrediente (Capsaicina) que se utiliza en cremas para
ayudar con los dolores en las articulaciones y en los músculos. Más sobre los
usos medicinales del chile aquí.
Valeriana:
se utiliza para combatir el insomnio y la ansiedad. En el primer caso hay
estudios que sugieren que ayuda para dormir (es un sedante) pero faltan datos
para corroborar sus efectos como tranquilizante. Se requieren estudios
científicos bien diseñados que demuestren su efecto para el tratamiento del
insomnio. Hay estudios patrocinados por el Centro Nacional de Medicina
Complementaria y Alternativa en Estados Unidos que están evaluando esto, así
como su uso para el tratamiento de los síntomas de la menopausia. Se desconoce
si su uso por más de 4 a 6 semanas es seguro. Puede causar dolor de cabeza,
mareo y cansancio, entre sus efectos secundarios.
Ginseng:
Existen varios tipos de ginseng, el proveniente de Siberia no se considera
efectivo. Puede tomarse como infusión (té) o conseguirse en polvo. Se usa para
mejorar el desempeño mental y para ayudar a bajar el azúcar en personas con
diabetes. Dicen que disminuye el estrés y, en combinación con vitaminas y
minerales, mejora el estado emocional y físico y la calidad de vida,
especialmente de los adultos mayores. En el oriente también se la usa para
tratar anemias, insomnio, gastritis e inapetencia sexual. Algunos estudios
científicos han encontrado que el Ginseng de Asia podría disminuir el nivel de
azúcar en la sangre y mejorar el sistema de defensa. Pero contamos con muy
pocas investigaciones de calidad en suficientes pacientes para poder tener conclusiones
definitivas. Se requieren más estudios. Algunos se están realizando en este
momento. Se piensa que consumirlo por periodos cortos no es problemático. Las
personas con diabetes deben tener precaución, especialmente si toman otras
medicamentos, porque pueden tener episodios de hipoglicemia cuando los combinan
con el Ginseng. Más sobre el Ginseng aquí.
Jengibre:
se lo suele utilizar para combatir las náuseas, aunque no se recomienda
consumirlo durante el embarazo o si se tienen antecedentes de hemorragias. Los
estudios han dado resultados mixtos en cuanto a su eficiencia para el
tratamiento de las náuseas causadas por el movimiento, la quimioterapia y/o la
cirugía. Se piensa que es seguro cuando se toma en dosis bajas. Entre sus
efectos secundarios puede causar acidez, gas, distensión y, en algunas
personas, náusea. Es más común que esto suceda cuando se toma en forma de
polvo. Idealmente consulta a tu médico sobre su uso. Más sobre el jengibre y
sus usos medicinales aquí.
Uña
de gato: suele usarse para mejorar las defensas y como anti-inflamatorio,
También se usa para condiciones como tumores malignos, gastritis, reumatismo,
artritis y enfermedades de la piel. A pesar de su popularidad, no hay
evidencias científicas de que sea efectivo. Algunos de los efecto secundarios
incluyen dolor de cabeza, mareo y vómito. Podría interferir con el control de
la presión arterial durante una operación, por lo cual es especialmente
importante que le digas a tu médico si la estás tomando y te van a operar.
Generalmente te recomiendan que lo suspendas mínimo dos semanas antes. Más
sobre los usos medicinales de la uña de gato aquí.
En
todos los casos, recuerda que es importante que hables con tu médico sobre el
uso de cualquier hierba, suplemento, vitamina o medicinas no recetadas para que
él o ella pueda indicarte si existe algún riesgo, especialmente si los combinas
con otras medicinas tradicionales. También es importante que no abandones tu
tratamiento médico para utilizar hierbas medicinales. Estas pueden ayudarte a
sentirte mejor y a acompañar el tratamiento que te haya indicado tu médico pero
no a reemplaza a la medicina convencional.
Finalmente,
si tienes alguna molestia que persiste o si la molestia es muy severa, ve al
médico, no te esperes. Esa molestia es una indicación de que algo está mal. El
no atenderla o el ocultarla con una pastilla o una hierba que te quite el
síntoma puede retrasar el tratamiento y aumentar el riesgo de que aparezcan
complicaciones.
Todo
en esta vida tiene su lugar, incluyendo la medicina integral, complementaria o
herbal. Lo importante es utilizarla a tu favor.
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