FAUSTO HERNÁNDEZ
Carlos Enrique Peredo Grau, José Tobías Ramiro Haquet, Mario Alberto Castro Jiménez, y Carlos Herrera González, así como, Porfirio Loeza Aguilar, actuales ediles de Teziutlán, Zaragoza, Tételes de Ávila Castillo, Atempan y Tlatlauquitepec, respectivamente, son los más obvios en promocionarse y hasta tomar como bandera la situación de la pandemia para lucrar políticamente para reelegirse o buscar una curul en el Congreso del Estado en el caso del primero, lo que para la gran mayoría no es ninguna novedad, no obstante, hasta aquellos regidores o directores de áreas quienes aspiran a ser presidentes municipales, diputados o miembros del Cabildo hacen de las suyas utilizando las estructuras y recursos de los Ayuntamientos.
Para empezar, menciono el caso específico de, Carlos Peredo, quien desde hace varios meses se ha dedicado a promocionarse, no sólo con la pandemia, sino con obras sociales, muchas de las cuales distan de cumplir con las expectativas, en las cuales obtiene beneficios personales, pues está comprobado de que detrás de cada vialidad nueva existe una nueva unidad habitacional, en la que busca la manera de extraer agua para dotarlas de este servicio.
Y es que el Arco Oriente, la rehabilitación y modernización de los palacios de las Juntas Auxiliares, entre otras edificaciones, son tomadas para proyectar una imagen de un edil que cumple demostrando su gran “visión”, tan es así que derrochan recursos del erario público para dar a conocer estas y otras acciones en la plataforma del YouTube y hasta en estaciones de radio clandestinas como fue en su reciente segundo informe de labores.
A Carlos Peredo le secundaron, José Manuel Bello, exsecretario general del Ayuntamiento, quien ha sido el más obvio en promocionarse con la pandemia, es decir con la salud pública derivada del Covid-19, también esta en la lista, Germán Delon Páez, pues a su paso en la dirección de Desarrollo Social aprendió como se lucra con la entrega justamente de apoyos sociales, todo por buscar un cargo de elección popular, María de los Ángeles Ballesteros, la regidora de Gobernación, no canta mal las rancheras, se quiere afamar por cualquier cosa, siendo que forma parte de su obligación, sin necesidad de tanto show y promoción en diversas páginas.
La regidora Teziuteca de Juventud y Género, Yazmín Tecozautla Zamora, lo mismo hace, sus entregas de corazón van de la mano con la publicidad, y lo mismo hacen otras personas de la Comuna.
Decía que en Atempan, Carlos Herrera, para todo se publicita, una vil campaña en descaró, se entiende por sus mensajes subliminales y que para todo quiere acaparar la atención, incluso se sabe desde el mismo Ayuntamiento que para eso existe una estación de radio clandestina que patrocina obvio con dinero del pueblo, pese a ser un delito grave el robo del espectro radioeléctrico y la evasión de impuestos, hasta donde ha llegado para convencer a los electores, lo que indica que no está seguro en las preferencias para la elección que se avecina, dado que de acuerdo a encuestas su tío lo aventaja por mucho, (Mario Herrera Oropeza), quien también figura para reelegirse y el conocido maestro de Nueva Alianza, a quien contemplan volver a postularlo, tiene más ventaja.
El edil tetelense, Mario Castro Jiménez, gasta mucho en su imagen, si bien existe un departamento de Comunicación Social, y recursos para publicidad, es más que evidente que lo que el hace es campaña, toda vez que para todo quiere llamar la atención, y si tuviera una fortaleza grande, no haría tanto show, así de simple.
Y qué decir del controvertido, Porfirio Loeza Aguilar, no desaprovecha ningún momento para hacer campaña, por ello hasta pesa una denuncia en su contra ante las autoridades electorales, pues se detectó que presuntamente violentó la ley, así de sencillo, pues de todos es sabido que quiere ser alcalde por cuarta ocasión, el emanado del Pacto Social de Integración (PSI).
Y José Tobías Ramiro, presidente de Zaragoza, está más preocupado en realizar proselitismo que a cumplir lo que prometió desde campaña de 2018, pues no lo encuentran en la presidencia, pero si inaugurando y dando banderazos de obras con su nuevo equipo, y hasta echa mano de la radio pirata llamada “La Rebelde”, en fin, hasta donde llegan por querer mantenerse en el poder.
Lo anterior queda en tela de juicio, porque es simplemente la honorabilidad y la ética de cada presidente municipal.
