DOCTORA ALIZA POSTED IN BEBÉS, SALUD ORAL
Los dientes de los bebés aparecen generalmente
entre los 4 y los 7 meses. Ocasionalmente, la dentición puede causar fiebre,
irritabilidad, exceso de saliva y por lo general, deseo de morder algo duro. A
continuación encontrarás una pequeña guía para esta etapa del bebé que puede
traer algunas molestias y te doy varias recomendaciones para aliviarlas.
¡Ay, los dientes! Cuando esos puntos blancos se
asoman por primera vez en las encías desnudas de tu bebé, es muy emocionante,
ya está creciendo, pero puede venir con sus molestias. Los dientes de leche, como se conocen debido
a que son temporales, empiezan a salir alrededor de los 4 meses y se prolonga
hasta los 30 meses, aunque esto puede variar dependiendo de otros factores como
la genética. Si a tu bebé no le empiezan a salir los dientes entre los 4 y los
7 meses, no te preocupes, por lo general se debe a la herencia y no significa
que haya algún problema.
Los primeros dientes que salen son los incisivos
frontales inferiores seguidos por los incisivos frontales superiores. Un mes
después, aproximadamente, aparecen los incisivos laterales inferiores (los
dientes que se ubican al lado de los incisivos), luego los superiores y después
los primeros molares. Los últimos dientes en salir son los caninos (a los que
algunas personas llaman colmillos). En total, tu bebé tendrá 20 dientes de
leche al cumplir tres años de vida.
¿Cuáles son las principales molestias que puede
tener tu bebé?
Exceso de salivación
Irritabilidad
Llanto frecuente
Deseos de morder algo duro
Sensibilidad en las encías
Se sospecha que la salida de los dientes puede
causar fiebre y diarrea, pero no hay investigaciones que respalden esta
afirmación.
¿Qué puedes hacer para aliviar la(s) molestia(s)
de tu bebé?
Cuando aparecen los síntomas de la dentición,
puedes:
Frotar las encías haciendo presión con tu dedo
limpio, con una gasa o pañito mojados con agua fría.
Darle un anillo o juguete para dentición,
idealmente, de los que se enfrían en la nevera o refrigerador (no en el
congelador)
Darle alimentos duros si ya empezó a comer, como
un pedazo de zanahoria o pepino teniendo siempre la precaución de que no se le
vaya a atorar.
Si no parece aliviarse y está muy irritable,
ofrécele algún remedio de venta libre u homeopático como gotas de camomila o un
medicamento como acetaminofén (Tylenol y otros) o ibuprofeno (Advil y otros)
pero nunca los que tienen benzocaína pues este compuesto se ha asociado con una
condición grave que reduce la cantidad de oxígeno en la sangre. Consulta con tu
pediatra para la dosis recomendada.
Si tu bebé tiene fiebre o le da diarrea, consulta
con tu médico. Por lo general, los síntomas de la dentición pueden manejarse en
casa, pero si tienes dudas o te preocupa algún síntoma, llama al pediatra.
Una vez que tu bebé tiene dientes es importante
que los limpies con una toallita mojada y luego con un cepillo pequeño para que
vaya aprendiendo los hábitos de higiene y además, para evitar el desarrollo de
caries (picaduras en los dientes). La Asociación Americana de Odontología dice
que no es necesario usar pasta de dientes en este momento. El agua es
suficiente hasta que tu bebé aprenda a escupir a los dos años de edad.
Recuerda que es importante que no dejes que se acumulen los restos de la comida y que no permitas el contacto prolongado de los dientes con los jugos o la fórmula, ya que esto contribuye a la caries dental. Siguiendo estos consejos estarás estableciendo buenos hábitos para el futuro y esto es básico para una buena salud oral a lo largo de la vida.