NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD" INFORMA
NOTICIARIO DE ANÁLISIS Y COMPRENSIÓN noticiasdeteziutlan@hotmail.com
VIERNES 2 DICIEMBRE 2016
En
tres lustros, el Centro Universitario de Participación Social (CUPS) de la BUAP
ha realizado una significativa labor y trabajo comunitario en diversas regiones
del estado, sobre todo en comunidades marginadas, acciones y esfuerzos que se
plasman en cientos de personas que aprendieron a leer y escribir, aseguró el
rector Alfonso Esparza Ortiz.
La
Biblioteca José María Lafragua enmarcó la ceremonia del 15 aniversario de este
centro orientado al trabajo comunitario y al cual los universitarios se suman
para enseñar las primeras letras en comunidades rurales de las sierras Norte,
Negra y Nororiental del estado, sin esperar nada cambio, reconoció el rector de
la BUAP.
“Cada
una de las personas que han aprendido a leer y escribir son un ejemplo de que
es posible superar rezagos y son la mejor bandera de este programa, así como el
mejor testimonio de los beneficios que conlleva la alfabetización y el trabajo
comunitario”, afirmó.
Mirta
Figueroa Fernández, coordinadora del CUPS, destacó que en 15 años de trabajo se
han consolidado 12 campañas de alfabetización y trabajo comunitario en zonas
rurales, con la participación de más de 700 estudiantes de preparatoria de la
BUAP.
Además,
seis escuelas comunitarias en colonias de la periferia del municipio de Puebla,
en las que colaboran estudiantes de servicio social y prácticas profesionales;
cuatro programas de alfabetización municipal; ocho bibliotecas comunitarias en
las sierras poblanas y tres centros permanentes de alfabetización de adultos en
el Bachillerato Internacional 5 de Mayo, la Preparatoria Lázaro Cárdenas del
Río, campus Zacatlán, y la asociación civil Yo´onlxim.
“Todos
estos proyectos nos han dado la oportunidad de trabajar y aprender con 23 mil
472 personas de diversas zonas del estado de Puebla”, comentó Figueroa
Fernández, quien anunció un proyecto en construcción con cuatro centros
comunitarios que abrirán más espacios para la participación social universitaria
y contribuirán a mejorar las condiciones de vida de la población de colonias de
la periferia de la capital poblana.
Silveria
Nava Segura, beneficiaria del programa, quien a la edad de 47 años terminó la
primaria y cinco años después la secundaria, reconoció el esfuerzo de los
alfabetizadores, quienes “no son estudiantes, sino unos grandes guerreros”.
Hoy, dijo sentirse capaz de continuar con sus estudios. Por su parte, Marcial
Hernández Velázquez, representante de la biblioteca pública y juez de paz de la
comunidad de Tatóxcac, del municipio de Ixtacamaxtitlán, agradeció la labor de
la BUAP en comunidades marginadas.