NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
INFORMA
NOTICIARIO DE ANÁLISIS Y COMPRENSIÓN noticiasdeteziutlan@hotmail.com
VIERNES 8 FEBRERO 2019
La
Facultad de Estomatología de la BUAP es la segunda unidad que a nivel nacional
se suma a la iniciativa de llevar un mayor control y registro de las patologías
bucales -después de la Universidad Autónoma de Guadalajara. Entre estas, el
cáncer oral que -si bien no está entre los tumores malignos de mayor
incidencia- de acuerdo con Global Cancer Observatory para el 2030 se
incrementará hasta en 50 por ciento a nivel mundial.
Se
trata de un tumor que tiene capacidad de generar metástasis, por lo que la mitad
de los pacientes fallece a los cinco años de ser diagnosticados con esta
enfermedad. Solo el 15 por ciento de los casos son detectados en etapas
tempranas.
“Al
prestar servicios bucodentales, la facultad tiene una casuística muy amplia,
por lo que podremos reportar el dato epidemiológico a la Secretaría de Salud y
con ello contribuir a la realización de un registro nacional sobre el número de
casos y tipo de patologías bucales”, indicó Samantha Rivera Macías, docente de
esta unidad académica.
Asimismo,
la Facultad de Estomatología forma parte de la Red Nacional contra el Cáncer
Bucal, integrada por diversas instituciones de educación superior y
asociaciones, cuyo objetivo es disminuir la presencia de casos nuevos de cáncer
a través de campañas de prevención y servicios de atención.
Es
así que todos los viernes, de 9:00 a 14:00 horas, sin costo alguno, personal
del Laboratorio de Histopatología atiende al público en general en la revisión
de alteraciones en la cavidad bucal e instruye a los pacientes en su
autoexploración.
En
caso de encontrar alguna anomalía, se toma una biopsia y se realiza un estudio
histopatológico. Con un costo menor a 500 pesos y entre una y dos semanas,
dependiendo el estudio, el paciente tiene un diagnóstico histopatológico. Si resulta
una alteración de tipo maligno se canaliza a las áreas pertinentes para su
atención, señaló Rivera Macías, especialista en patología bucal, quien comentó
que en lo que va de este año se detectaron dos casos: plasmocitoma y carcinoma
escamocelular.
“A
nivel estatal, la BUAP es la única universidad que brinda el servicio de
patología bucal, lo cual representa un gran avance en la detección de lesiones
malignas. Saber cuántos pacientes tienen alteraciones y dar seguimiento a su
atención contribuye a prevenir alteraciones y reducir la cifra de cáncer
avanzado”, destacó la académica.
¡Saca
la lengua!
Los
principales factores de riesgo para desarrollar cáncer oral son el consumo de
tabaco y alcohol, así como la irritación constante por el uso de prótesis mal
ajustadas y la alimentación muy caliente que modifican la mucosa oral. Los
sitios más afectados serán labio, lengua, encía, paladar y piso de boca.
La
doctora Samantha Rivera Macías indicó que este tipo de cáncer es más frecuente
en hombres que en mujeres, en un rango de edad de los 30 a 70 años. Hasta 2018,
se han presentado en Puebla 833 casos, de los cuales desafortunadamente no
todos han sido tratados.
“El
paciente visita en promedio a siete dentistas antes de llegar con un patólogo,
lo cual retrasa su diagnóstico. Generalmente, el cáncer oral se confunde con un
hongo, en específico con candidosis bucal, por lo que su mal tratamiento
retrasa su detección, de seis meses a un año y medio, tiempo suficiente para
generar metástasis”.
Para
crear conciencia en la población sobre los riesgos e incentivar el autoexamen
oral, la Facultad de Estomatología realizó la primera campaña “Saca la lengua.
Previene el cáncer oral”, en la que se atendieron a 150 pacientes, de ellos uno
presentó cáncer de parótida.
El
pasado 5 de diciembre (Día Internacional y Latinoamericano contra el Cáncer
Bucal) se enseñó a los pacientes a poner énfasis en la identificación de
lesiones blancas y rojas en la mucosa, además de úlceras con más de 15 días sin
cicatrizar, ya que el cáncer en etapas iniciales no duele.
De
igual manera se hizo hincapié en modificar los estilos de vida, relacionados
con el consumo de comida rápida y alimentos demasiado calientes. “El calor
adelgaza los epitelios, lo cual promueve la renovación constante de células. Si
ese adelgazamiento es constante, las células tienen una mayor actividad y, por
ende, se incrementa el riesgo de que se transformen o muten. Si a esto se suma
el factor irritativo, el consumo de tabaco y alcohol, y la genética, la célula
es más susceptible de transformarse”, detalló Rivera Macías.
Dependiendo
la región, es el tipo de cáncer
El
cáncer es una enfermedad que reporta anualmente 195 mil casos nuevos y 85 mil
fallecimientos en México, la mayoría de estos por un diagnóstico tardío, ya que
siete de cada diez pacientes con cáncer acuden a las instituciones de salud en
etapa avanzada. En el caso de Puebla, 14 de cada 100 defunciones son por
cáncer.
Las
neoplasias más frecuentes en el país, según el Instituto Nacional de
Cancerología, son de mama, próstata, dermatológicos -como linfomas-, cérvico
uterino, colon y estómago.
La
incidencia de los diferentes tipos de cáncer tiene relación con los estilos de
vida. “Si dividimos al país en tres regiones: norte, centro y sureste, la
frecuencia de tumores es distinta en cada región, porque tiene que ver con
estilos de vida; a su vez, la mortalidad está asociada con el acceso de la
población a los recursos para su tratamiento, como medicamentos y terapias de
radiación”, expuso Miguel Quintana Quintana, jefe de Oncología del Centro
Médico Naval de la ciudad de Mexico, durante el Tercer Foro Nacional de Líderes
contra el Cáncer. “Modelos innovadores en cáncer para transformar a México”,
cuya sede fue la BUAP.
El
especialista detalló que el sureste del país tiene una mayor prevalencia de
cáncer gástrico por el elevado consumo de sal. “En el caso de la zona centro,
en la cual se ubica el estado de Puebla, predomina el cáncer de mama y
próstata”.
Con
respecto al cáncer de cabeza y cuello, abundó que este tiene dos factores
importantes: el consumo de alcohol y tabaco, así como su prevalencia en jóvenes
con virus del papiloma humano, debido a las prácticas sexuales.
Por
otra parte, dijo que uno de los problemas principales del cáncer es su
diagnóstico en etapa avanzada, en lo que influyen diferentes factores, entre
estos el primer contacto con médicos generales o familiares, quienes no piensan
en la presencia de cáncer. De ahí la importancia de modificar los programas
curriculares en las instituciones de educación superior y acercar a los
estudiantes a esta patología.