NOTICIAS TEZIUTLÁN "LA PURA VERDAD"
INFORMA
NOTICIARIO DE ANÁLISIS Y COMPRENSIÓN noticiasdeteziutlan@hotmail.com
VIERNES 15 SEPTIEMBRE 2017
“Sus compañeros de trabajo al ver que había muerto se
retiraron del lugar y abandonaron el cuerpo”
Un albañil perdió la vida al electrocutarse con cables de alta tensión y caer desde 7 metros, de la azotea de un domicilio de la colonia Belisario Domínguez. Sufrió quemaduras por el shock eléctrico y traumatismo craneoencefálico cuando chocó su cuerpo contra el asfalto de la calle. Sobra decir que el hombre murió casi de forma instantánea.
El hombre intentaba colocar una ventana en un domicilio ubicado en la 35 Sur y 15 Poniente, de la citada colonia. Este fatal accidente ocurrió poco antes de las tres de la tarde el miércoles.
Algunos testigos indicaron a las autoridades que este hombre estaba trabajando con otros dos albañiles, los cuales al ver el accidente se retiraron, abandonando el cadáver en la vía pública.
El propietario del domicilio mostró nula colaboración con las autoridades, pues se encerró y aunque llamaron a su puerta en repetidas ocasiones, se negó a abrirles y mucho menos a hablar con los agentes ministeriales. Por lo que no se pudo realizar la inspección correspondiente dentro del domicilio.
El hoy occiso portaba entre sus pertenencias una cartera en donde la policía localizó una credencial de elector a nombre de Raúl Hernández Pérez, de aproximadamente 35 a 40 años de edad, el cual correspondía con las características del finado.
Hay que resaltar que el hombre fue revisado por paramédicos del Grupo Relámpagos de Protección Civil Municipal y de Cruz Roja, quienes confirmaron que el cuerpo presentaba quemaduras y fracturas como un trauma craneoencefálico severo, y ningún signo de vida.
Un policía auxiliar que estaba de servicio brindando seguridad a las oficinas de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), ubicadas a unos metros de donde ocurrió el accidente, fue el primero en tomar conocimiento de lo ocurrido.
Se desconoce la mecánica del accidente, pero se presume que mientras laboraba, el hombre tocó por error los cables de alta tensión, y después cayó.
Llamó la atención un vaso transparente con una bebida oscura que estaba en la parte alta donde se presume laboraban los trabajadores de la construcción, sin embargo no se supo qué bebida contenía, pues el propietario de la casa se negó a abrir y dialogar con los agentes investigadores.
